Participar en las actividades que disfruta y hacer ejercicio pueden ayudarlo a sentirse mejor, a seguir teniendo una vida social, a mantener un peso saludable y a tener hábitos regulares de sueño.
Intente con estos consejos para mantener un estilo de vida activo y saludable:
Trate de estar físicamente activo durante al menos 30 minutos la mayoría o todos los días de la semana. Sin embargo, sea realista sobre cuánta actividad puede hacer de una sola vez. Lo mejor es realizar varias «mini rutinas de ejercicio» de menor duración.
Establezca como objetivo una combinación de diversos tipos de ejercicio: resistencia, fortalecimiento, equilibrio y flexibilidad. Por ejemplo, podría combinar caminar o bailar con levantar pesas, pararse en un solo pie y estirarse. Incluso las actividades diarias, como las tareas del hogar y la jardinería, lo ayudan a mantenerse activo.
A medida que avance la demencia, es posible que tenga que cambiar su dieta para mantener un peso saludable. Hable con su médico sobre la mejor dieta para usted y elija alimentos nutritivos como frutas y verduras, cereales integrales y fuentes magras de proteínas y productos lácteos. Evite los azúcares agregados, las grasas saturadas y el sodio.
Mantenga su vida social al hablar por teléfono con familiares y amigos, unirse a un grupo de apoyo en línea o salir a caminar por su vecindario.